Del Taijiquan estilo Chen

 

Chen Wang Ting, fundador del Taijiquan, militar de carrera y tras la caída de la dinastía Ming, dedicó sus últimos días al desarrollo, practica y enseñanza de la génesis del Taijiquan. Según los “Anales de la Familia Chen” fue al parecer el primero en introducir la práctica de boxeo, en el seno de la familia; así como el manejo de la lanza, el sable y la alabarda.

 

La forma de Sable, pertenece a las rutinas de armas cortas de Chen Taijiquan, inicialmente tenía 13 movimientos, llamada “Sable de 13 movimientos”, antes de la década de 1930.

 

Entre 1930 y 1938 el maestro del estilo Chen de la generación XVIII, Chen Zhaopi (Maestro de armas), enseñó Taijiquan en el famoso Instituto de Guoshu de Nainjing. Sintiendo que la forma era demasiado corta, agregó nueve movimientos adicionales, creando así la forma que hasta hoy se práctica en Chenjiagou, con un total de veintidós movimientos.

 

La rutina de sables, es la más corta dentro de las rutinas de armas tradicionales del estilo Chen, es una rutina corta y dinámica, concentrándose en blandir u ondear el arma alrededor de la cabeza, adicionalmente golpear, cortar, enganchar o esquivar (trabar), detener y bloquear, giros contundentes (enérgico), estocar (pinchar o apuñalar), levantar sobre la cabeza.

 

Las 13 técnicas del sable combinadas con las otras técnicas del TaiChi estilo Chen, como la forma de caminar, la técnica de pies y de piernas, saltos y giros. Hacen que la rutina sea hermosa (agraciada), natural y de gran alcance. Además de representar las características propias del estilo Chen de Taijiquan; integrando la dureza con la suavidad.

 

Aunque es un arma corta, el sable puede cubrir una distancia engañosamente larga, mediante el uso de saltos, y giros explosivos. Parte del trabajo de pasos, puede realizarse por saltos.

Como es una forma enérgica, cada postura es viva, en China dicen que el sable se muestra como “un tigre feroz, con la fuerza de la montaña Hua (HuaShan)”.

 

Los movimientos se pueden realizar de manera diferente, dependiendo el objetivo de la práctica. A menudo, la forma se ejecuta en posturas altas y bajas, como medio para acondicionar el cuerpo aumentando la resistencia, potencia y la velocidad.

 

Para adquirir beneficios tanto marciales como de acondicionamiento, el practicante debe entrenar en una diversidad de alturas.

• Las posturas muy bajas, sin embargo, carece de la agilidad necesaria para el uso en el combate.
• Cuando se enfoca en las aplicaciones del sable, el énfasis debe estar en posturas más altas para aumentar la movilidad.

 

La fuerza del arma significa que, los movimientos de corte son grandes, expansivos y poderosos. En apariencia, usar el sable es como “dividir una montaña”.

 

Al igual que las otras armas del estilo Chen, es importante que el sable se practique después de haber logrado una base, a través de las rutinas de formas de mano.

 

Al realizar la rutina de Sable, el practicante alterna entre el cuerpo que lleva el sable y el sable que lleva al cuerpo. Las técnicas deben ser precisas, cumpliendo claramente los requisitos de la aplicación, así como los principios de Taijiquan en la técnica.

 

Importancia de la mano Vacía.

 

A lo largo de la rutina, se debe prestar igual atención a la mano vacía y a como se usa, para regular los movimientos del arma.

•  A veces la mano se usa para bloquear u despejar.
• Otras veces, la palma vacía soporta el borde romo del arma, lo que agrega fuerza a la técnica.
• La mano vacía también puede actuar para contrarrestar las acciones del sable.

Existe un dicho que dice, “para conocer el sable simple, siga la mano izquierda”

 

Todas las armas de Taijiquan, tienen en común el principio por el cual se explotan. Al igual que las formas de mano, el cuerpo se está moviendo de una manera completamente contenida, para que las energías físicas se desarrollen plenamente; pero en este caso el organismo incluye el arma.

 

El arma, se convierte en parte de nosotros y está suspendida dentro de la totalidad de nuestros movimientos. Centramos nuestra atención en nuestro flujo de energía en todo nuestro cuerpo, en los puntos ultra periféricos y más importante de nuestra arma.

 

El “Centro de percusión” de un sable o una espada, es el punto de la hoja que transmite la máxima potencia al objetivo en un tajo. El impactar en el objetivo con el centro de percusión conlleva también que la base, en este caso la empuñadura, no se desplace en el impacto y por lo tanto exige menor esfuerzo de corte. El impactar más allá del centro de percusión exige un agarre más firme y, consecuentemente, mayor esfuerzo para controlar la empuñadura y no perder el sable de la mano en el impacto.

 

En el caso de sables de hoja estrecha, el punto de percusión suele hallarse donde comienza el último cuarto de la hoja; mientras que, en sables cuya hoja se ensancha conforme se acerca a la punta, el centro de percusión es un punto más amplio y más cercano a la punta.

 

El objetivo de esta forma, es hacer que el arma prácticamente forme parte de nosotros mismos.

 

 

 

LA PRACTICA CON EL SABLE

 

 

Cuando se inicia la práctica de sable, se debe aprender en primer lugar sus movimientos básicos, realizándolos con suavidad y cumpliendo con los principios de Taijiquan. A través de la práctica constante, se puede desarrollar gradualmente la fuerza del agarre de la mano (sin tensión), la flexibilidad de la muñeca y acostumbrarse a las fluctuaciones y uso de los distintos tipos de agarre, según la técnica a utilizar.

 

El sable tiene su lomo más grueso, lo que incrementa el peso del arma, lo que a su vez, permite aumentar la fuerza durante la práctica, al igual que la inercia, que con una adecuada coordinación, aumenta la velocidad de su técnica; lo que le otorga al sable el carácter de poderoso y feroz.

 

La velocidad en los movimientos, y el Qi depositado en el arma, hace que la hoja durante algunos movimientos emita un sonido único y característico del sable.

 

Al ejecutar las técnicas del Sable, éste se agarra con la mano derecha, mientras que la izquierda realiza una serie de movimientos que involucran distintas extensiones del brazo, oscilaciones, y formas de palma, aumentando, equilibrando o dando soporte a la técnica del sable.

 

No se debe mover el sable, con la mano izquierda estática; la coordinación de la mano izquierda debe estar en equilibrio con lo que hace la derecha con el sable, de esta forma la mano izquierda presta la fuerza a la derecha. Por lo que, cuando el sable se mueve, la mano izquierda se mueve; cuando la mano izquierda se mueve, el sable de mueve.

 

Entonces, la persona insta al movimiento del sable, así como el sable insta al movimiento de la persona. Si los movimientos del sable son rápidos el cuerpo se mueve rápido y si los movimiento del sable son lentos, el cuerpo se mueve lento.

 

La coordinación básica entre la mano libre y el arma, en forma generalizada, podría decirse que es:

• Sable a la izquierda, mano libre a la derecha
• Sable hacia arriba, mano libre hacia abajo
• Sable hacia abajo, la mano libre hacia arriba
• También existen los movimientos en que ambas manos están en la misma dirección, como al presionar el sable con la mano izquierda sobre la hoja, o cuando esta sobre el lado romo, para intensificar y fortalecer el bloqueo.

 

Al dominar las habilidades básica, se debe practicar repetidamente la técnica de sable, y cuando se alcanza el fortalecimiento, la resistencia y la velocidad, entonces enfocamos la práctica en la implicación de combate, consciente de conocer de manera correcta el agarre del puño de contacto, así como su centro de percusión, es decir, al foco de fuerza en cada movimiento, al cual dirigimos y concentramos el Qi.

 

A través de la práctica constante , el objetivo de la práctica será preciso, y la fuerza llena y solida. Solo al dominar las habilidades básicas, se podrá dominar las técnicas del sable.

 

»El entrenamiento con armas, puede mostrarnos el camino de la seriedad, respeto y humildad.«

 

 

Nombres de los Movimientos de la Forma de Sable por sección.

 

Sección 1;  5 movimientos -   1 al  5

Sección 2;  5 movimientos -  6  al 10

Sección 3;  6 movimientos - 11 al 16

Sección 4:  6 movimientos - 17 al 22

 

Sección 1. 

Mov.1  Postura de preparación   (5)

MOv.2  Proteger el corazón con el sable   (11)

Mov.3  El dragón verdeazulado emerge fuera del agua   (5)

Mov.4  El viento arranca la flor seca   (3)

Mov.5  La nube blanca oculta la cumbre   (2)

 

Sección 2. 

MOv.6  El tigre negro busca en la montaña   (4)

Mov.7  Su Qin lleva el sable a la espalda   (2)

Mov.8  El gallo dorado se sostiene en una pata   (2)

Mov.9  Tomar el sable, redirigirlo y esquivar   (1)

Mov.10 Cortar la serpiente blanca desde la cadera   (3)

 

Sección 3. 

Mov.11 Dibujar 3 anillos alrededor del sol   (10)

Mov.12 Apartar las nubes para ver el sol   (1)

Mov13. Arar la hierba y buscar la serpiente - por la izquierda   (2)

Mov.14 Arar la hierba y buscar la serpiente - por la derecha   (2)

Mov.15 El dragón verdeazulado emerge fuera del agua   (3)

Mov.16 El viento arranca la flor seca   (3)

 

Sección 4. 

Mov.17 El ganso salvaje agita las alas   (5)

Mov.18 Yecha (explora) se extiende hacia el mar  (3)

Mov.19 Girar el cuerpo y realizar un golpe – por la derecha   (3)

Mov.20 Girar el cuerpo y realizar un golpe - a la izquierda   (3)

Mov.21 La serpiente blanca saca la lengua   (3)

Mov.22 Abrazar la luna y moverla hacia el pecho   (3)

 

Mov.23 Postura de cierre   (5)